top of page
sketch1578080779544_edited.jpg

SOY MI RESTAURANTE

FAVORITO.

soymirestaurante1.png

En esta época donde los tiempos para alimentarnos cada vez son más reducidos y ajetreados, donde somos clientes frecuentes de la comida a domicilio por medio de aplicaciones o donde elegimos comer en restaurantes más que en nuestra propia casa por temor a seguir comprando comida que eventualmente se termina desperdiciando, es necesario retomar y reinventar el acto de preparar nuestros alimentos. 

 

El comer en casa es y ha sido una de las mejores opciones tanto en términos de salud como en economía, pero, que nos detiene de ser nuestro restaurante favorito? quizá podríamos culpar a la falta de tiempo, a la falta de creatividad culinaria, tal vez a una mala experiencia o simplemente el hecho de que una cocina es un sitio no explorado. 

 

Comer en casa o bien preparar nuestros alimentos para llevarlos, puede resultar una de las actividades más terapéuticas que existen, está comprobado que la terapia culinaria puede contribuir a una mejoría en pacientes con ansiedad, depresión y varios problemas que involucran la salud mental. 

 

Cocinar pone a prueba nuestra paciencia y nuestra capacidad para experimentar, nos permite disfrutar la preparación de nuestros alimentos, de adaptarlos a nuestros gustos, nos da confianza y un empoderamiento que al intentarlo una vez, es imposible dejar pasar la oportunidad de hacerlo una experiencia compartida. 

 

El acto de cocinar puede dejar de ser insufrible si lo vemos desde otra perspectiva, si le damos la oportunidad y comenzamos desde lo mínimo, podemos ser nuestro restaurante favorito, aquél al que vamos continuamente, aquel donde conocemos los mejores platos y participamos activamente en su preparación, aquél donde el cliente más importante somos nosotros mismos.

​

​

-DC

Ilustraciones por @vendranlluviasuaves

bottom of page